Los estudios sobre la problemática agraria en América Latina son abundantes, comenzaron a aparecer con mayor intensidad en la década de los años 70 del siglo XX cuando diversas naciones latinoamericanas experimentaron profundas crisis sociales por causa de las políticas económicas que permitieron desde los tiempos coloniales la concentración de la tierra y la riqueza en un grupo muy reducido de la población, creando una desigualdad descomunal desencadenada en la formación de movimientos sociales y revueltas campesinas que exigieron mejor calidad de vida y acceso a la tierra.

Partiendo de lo anterior, con esta mesa temática se busca que los investigadores dialoguen y analicen por qué los problemas agrarios generaron conflictos y tensiones sociales, políticas y económicas en América Latina durante la segunda mitad del siglo XX. Un periodo marcado por la desaceleración económica regional, el descontento social y la agudización de la violencia a escala nacional e internacional. Para afrontar dichos problemas, los Estado latinoamericanos implementaron una serie de políticas socioeconómicas que ayudaron relativamente a jalonar el crecimiento del agro, pero estas medidas no fueron la solución definitiva, por el contrario, la estructura agraria no cambio de manera estructural, la concentración de la tenencia de la tierra se mantuvo igual en algunas regiones, pero con el surgimiento de nuevos actores sociales que generaron conflictos por su disputa y el control territorial.